Las instituciones federales de salud continúan en Acapulco, Guerrero, con acciones como la instalación del Hospital Móvil del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), que estará en funcionamiento en los siguientes 10 días. Sustituirá de manera temporal al Hospital General, que sufrió daños graves por el paso del huracán Otis.

En el momento de la emergencia meteorológica había 32 pacientes internados, la mayoría de los cuales ya se encuentran en otros nosocomios. El domingo sólo quedaban cuatro en el área habilitada por las autoridades del hospital con 20 camas y consultorios a los que pueden acudir los derechohabientes y población abierta.

El Issste indicó que la Unidad de Medicina Familiar Acapulco también sufrió daños graves y hay afectaciones menores en cinco clínicas periféricas.

Ayer, el secretario de Salud, Jorge Alcocer, encabezó un recorrido por la sede de la Ssa en Acapulco, así como por los hospitales de IMSS Bienestar El Quemado y Renacimiento, donde el personal comentó las necesidades que tienen de medicamentos y diversos insumos indispensables. En esos sitios laboran 18 especialistas de la Comisión Coordinadora de Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad que se trasladaron desde la Ciudad de México.

El Instituto Mexicano del Seguro Social informó que de los 40 pacientes que estaban en el Hospital General Regional (HGR) de Zona Número 1 Vicente Guerrero, 18 son menores de edad que fueron trasladados al Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional Siglo XXI.

Algunos son recién nacidos prematuros y otros presentan cuadros de asfixia perinatal con traqueostomía, vejiga neurogénica, lesiones en tendones, sospecha de apendicitis, entre otros padecimientos.

Todos los enfermos ya se encuentran en otros nosocomios en la Ciudad de México, ya que el HGR 1 también sufrió daños severos.

Mandan suministros

La Secretaría de Salud (Ssa) informó que ayer salieron hacia el puerto de Acapulco más de 30 mil insumos para atender enfermedades diarreicas, crónicas, infecciones respiratorias, padecimientos de la piel y los transmitidos por mosquitos, que son los más frecuentes en situaciones de emergencia como la actual.

También viajaron 34 profesionales de la salud, entre operadores, brigadistas, personal médico, de enfermería y promotores de la salud, así como cuatro unidades móviles y nueve vehículos de brigada. Trabajarán en la identificación de personas que viven con enfermedades crónicas y requieren mantener la continuidad de sus tratamientos, entre otros, para diabetes, hipertensión, VIH, hepatitis C y tuberculosis.

El personal médico y operativo se suma a los más de 800 trabajadores y las 26 brigadas de la Ssa que están en Acapulco desde la semana pasada.

La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios reportó que personal de las agencias sanitarias estatales también se integra a las tareas de vigilancia y fomento sanitario en Acapulco.

Entre otras actividades, las brigadas de la agencia sanitaria realizan pruebas para detectar bacterias coliformes en el pozo de agua Icacos, que surte al día 13 pipas con capacidad de 10 mil litros para abastecer a la población.