Aproximadamente la mitad de los mexicanos que viven en Estados Unidos con documentos para residir legalmente es propietaria de su vivienda, reveló el Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla), lo que refleja la mejoría económica que ha alcanzado ese segmento de la población a raíz de los mejores salarios y trabajos que ofrecen las empresas en territorio estadunidense.

El Foro de Remesas América Latina y El Caribe, organismo que depende del Cemla, muestra que en Estados Unidos la población mexicana inmigrante es 10 millones 678 mil 502 personas, mismas que habitan en 4 millones 509 mil 865 viviendas, 2 millones 420 mil 372, de su propiedad, es decir, 54 por ciento del total.

Lo anterior indica que un porcentaje importante de migrantes mexicanos en Estados Unidos han tenido acceso a un crédito hipotecario, destacó Jesús A. Cervantes González, coordinador del Foro de Remesas del Cemla.

Para tener una referencia, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Vivienda, presentada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía presentada en febrero pasado y con datos hasta 2020, en México existen 35.3 millones de viviendas y siete de cada 10 personas son propietarias de su hogar o lo están pagando, es decir, 70 por ciento. En EU, según información del foro, dentro del grupo migratorio mexicano, la mediana de los gastos mensuales de una vivienda propia con hipoteca es de mil 634 dólares (25 mil 475 pesos al tipo de cambio actual), mientras los de una vivienda propia sin hipoteca es de 513 dólares mensuales (9 mil 280 pesos).

Cervantes González destacó que de 2007 a 2013, en EU se redujo el porcentaje de hogares de población mexicana inmigrante que eran propietarios de su vivienda como consecuencia de la crisis financiera e hipotecaria que registró la economía estadunidense y por la recesión que se presentó en los primeros años de ese periodo, lo que también se observó en la población nativa.

De 2007 a 2012, la mediana del valor de las viviendas propias de la población mexicana inmigrante se redujo, lo que implicó una fuerte pérdida de riqueza del grupo migratorio mexicano. A partir de 2013, tras tocar un fondo de 114 mil dólares, el valor de las referidas viviendas inició una recuperación y en 2022 la mediana de su valor se situó en 250 mil 800 dólares, apuntó el especialista.

Además, dijo, ese aumento en el valor del patrimonio del grupo migratorio mexicano pudo haber generado un efecto riqueza que incentivó el envío de remesas a México, las cuales se encuentran en un nivel sin precedente de más de 60 mil millones de dólares anuales.

El incremento en los años recientes en Estados Unidos en el porcentaje de hogares de inmigrantes mexicanos que son propietarios de su vivienda, reportó el foro, refleja la mejoría económica que ha alcanzado dicho grupo migratorio.

Según cifras del Cemla, el ingreso total de la población inmigrante mexicana registró un nivel mínimo en 2010 al descender a 192 mil millones de dólares, pero luego comenzó a recuperarse de manera que en 2022 alcanzó un máximo de 337 mil millones de dólares anuales.