Tuvimos suerte, sentenció el presidente Andrés Manuel López Obrador al referirse a la cifra de fallecimientos, al comportamiento atípico del huracán Otis y la fuerza con la que impactó la bahía de Acapulco, pues las consecuencias pudieron ser más graves.

En su conferencia matutina de ayer, el mandatario reaccionó sobre la cantidad de muertes –algunos medios reportaron cifras mayores a las oficiales– y se le presentó el símil con la tormenta tropical Paulina, que en 1997 golpeó Acapulco en categoría 4 dejando más de 200 decesos, ante lo que declaró: el número de personas que pierden la vida no debe ser tan significativo, no deja de ser algo cuantitativo. Una persona que pierda la vida es algo lamentable. Yo sí creo que tuvimos suerte, la naturaleza, el creador nos protegió, aun con la furia del huracán.

Pidió esperar a tener más información sobre las personas que han perdido la vida o no aparecen. Todo indica que, aun siendo lamentable la pérdida de cualquier persona, no fueron tantos ante un fenómeno tan fuerte, tan impactante, un huracán categoría 5.

De acuerdo con el reporte presentado al jefe del Ejecutivo, hasta ayer en la mañana se mantenía la cifra de fallecidos en 27 y se reportaban cuatro desaparecidos.

El meteoro, agregó el tabasqueño, no impactó en una zona despoblada, sino que entró por la bahía, donde habitan alrededor de un millón de personas. Entonces, sí, muchos daños materiales, pero afortunadamente no estamos registrando muchas pérdidas de vidas humanas.

Se le preguntó sobre la supuesta ausencia de la Guardia Nacional y el Ejército mientras ocurren saqueos a distintos comercios, pero el Ejecutivo federal rechazó esos señalamientos y apuntó que ayer se establecieron retenes para mantener el orden. Había una situación de emergencia, de mucha incertidumbre y miedo, todo esto sucede cuando hay una tragedia de estas dimensiones. Fue muy fuerte el impacto del huracán.

Descartó que exista el riesgo de un estallido social y sostuvo que la gente en Guerrero es como en todo México, muy solidaria y tenemos muy buena comunicación con ellos. Asimismo, aseveró que la gobernadora Evelyn Salgado se encuentra en la zona del desastre participando en las acciones de ayuda.

Frente a las críticas que apuntan a que las autoridades no hicieron los avisos a tiempo, López Obrador aseveró que se actuó de la mejor manera y se usaron diversos canales para alertar a la población, incluido el perifoneo (parlantes en camionetas que circulan por las colonias). Recordó que tres horas antes del impacto del huracán, él mismo posteó un mensaje de alerta en la red social X.

Indicó que la prioridad en la entrega de apoyos será brindar alimentos a damnificados, rehabilitar escuelas, caminos y servicios básicos. Eso es lo que debemos resolver para evitar una crisis de consumo, que se tengan alimentos básicos y ya lo estamos haciendo.

Además, el Presidente anunció que ayer comenzó en las zonas afectadas el censo casa por casa para evaluar los daños en unos 400 mil hogares, que se levantará con el apoyo de mil servidores de la nación. Esto es para toda la población, se les va a ayudar en la construcción y reparación de las viviendas, los enseres domésticos que perdieron, lo que tienen que ver con aparatos electrodomésticos, estufas, refrigeradores, colchones, lo que se necesita ya se está trabajando en conseguir.

Agregó que ya se tienen 10 mil paquetes para empezar con electrodomésticos y vamos a adquirir todos los que sean necesarios.

Para responder a las voces que cuestionaron que viajara por tierra y no por aire a la zona del desastre el miércoles después del huracán, el mandatario respondió que esto le permitió constatar de primera mano dos elementos: el nivel de los daños y la solidaridad de la gente.

No dejó de lado destacar la labor del Ejército y la Marina ante este tipo de eventos.

La mayor organización logística y de protección a la población civil es la de las fuerzas armadas. Su apoyo es importantísimo, por la forma en que desarrollan sus actividades. (La Secretaría de) Gobernación no tiene la organización que se requiere para esos casos, (la Secretaría de) Comunicaciones no lo puede todo, Bienestar, los gobiernos estatales, municipales no tienen la capacidad para enfrentar una emergencia de estas dimensiones, expuso.