El director de la Facultad de Medicina (FM), Germán Fajardo Dolci, no está confiado de convertirse en el cuarto médico rector de manera continua en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), pero sí se sintió muy seguro ante los 15 miembros de la Junta de Gobierno.

Ayer, el también ex funcionario federal en gobiernos anteriores comentó que respondió a dos rondas de preguntas que le formuló este órgano colegiado para evaluar su plan de trabajo y con ello tomar una decisión para la designación de la rectoría en el periodo 2023-2027.

El especialista en otorrinolaringología y desde hace 24 años profesor de asignatura en pregrado, posgrado y cursos de educación continua fue el sexto aspirante entrevistado por este órgano colegiado. Éste iniciará la deliberación la próxima semana y tiene previsto definir el nombramiento antes del 10 de noviembre, aunque no hay una fecha específica.

Por la tarde de ayer, William Lee Alardín, coordinador de investigación científica de la universidad y ex director del Instituto de Astronomía, también compareció ante la Junta de Gobierno, pero comentó que no compartiría su experiencia al salir de este encuentro, como sí lo hicieron los seis aspirantes que lo antecedieron y conversaron con La Jornada.

Después de una comparecencia de tres horas y media, Fajardo Dolci salió por la puerta principal de la Torre de Rectoría y se fue caminando a la FM. Antes, relató que se sintió muy contento de ser parte de este proceso, en el que le preguntaron sobre el funcionamiento de la universidad, el quehacer cotidiano y los problemas que enfrenta.

Fue un encuentro muy serio, cordial, amigable y de alto nivel intelectual, afirmó tras explicar que el tema principal fue la parte académica y sobre todo el tema de los alumnos, así como la preocupación por mantener el prestigio de la UNAM.

A pesar de que ya ha pasado por entrevistas como ésta, pues tuvo que hacer dos para encabezar la FM, confesó que siempre que uno se enfrenta a un órgano colegiado se siente como en una competencia y suele haber nervios, pero añadió que las preguntas fueron respetuosas y se desarrolló en un ambiente muy terso.