Martes 24 de octubre de 2023, p. 28
Washington. Los servicios secretos de Ucrania perpetraron el asesinato de la hija de un alto funcionario del Kremlin el año pasado con una bomba oculta en un transportador para gatos, informó ayer el diario Washington Post tras una larga investigación.
El diario estadunidense asegura que Kiev estuvo detrás de un atentado cometido en agosto de 2022 cerca de Moscú, contra Daria Dugina, defensora de la guerra contra Ucrania e hija del ultranacionalista Alexander Dugin.
Esta mujer, de 29 años, murió por una bomba colocada en su coche. El artefacto fue pasado por la frontera de Ucrania un mes antes, oculto en una caja para transportar los gatos de una mujer y su hija de 12 años, según fuentes anónimas citadas por el Post.
Esta mujer alquiló un departamento cerca de la casa de Alexandre Dugin, quien era el blanco del atentado, pero este último se subió a otro coche el día de la explosión.
Rusia atribuyó a Ucrania la autoría del atentado, acusación que Kiev rechazó.
Fuentes estadunidenses citadas por el New York Times en octubre de 2022 ya mencionaron la participación de Ucrania en la explosión.
Ucrania ha llevado a cabo varios asesinatos selectivos, subraya el Washington Post, que cita fuentes ucranias y estadunidenses.
Según el periódico, los servicios ucranios mataron a tiros a un ex comandante de un submarino ruso en julio en el sur de Rusia. Cada operación de este tipo recibe luz verde del presidente ucranio, Volodymir Zelensky, añade.
Los servicios secretos ucranios que llevan a cabo estas operaciones –el SBU y el GUR militar– han sido entrenados, equipados y asesorados durante años por la CIA, de acuerdo con el Post.
El periódico asegura que la agencia de inteligencia estadunidense proporcionó equipos de comunicación y de espionaje electrónico, uniformes falsos de separatistas prorrusos e incluso participó en la construcción de oficinas del GUR.
En tanto, el Servicio Estatal para Situaciones de Emergencia de Ucrania ubicó en 261 los civiles muertos a causa de minas y explosivos colocados por Rusia en territorio ucranio desde el estallido de la guerra, en febrero de 2022.
Precisó que entre las víctimas figuran al menos 14 niños, y añadió que los explosivos rusos causaron heridas de diversa gravedad a otras 559 personas, incluidos 68 niños.
En el plano diplomático, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, en una conversación telefónica con su par ruso, Vladimir Putin, pidió una solución diplomática al conflicto, informó el servicio de prensa del Kremlin.