En el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, Cecilia Toussaint revivió historias, anécdotas y dedicó el concierto Noche de día y otros amaneceres a quienes la han acompañado en el sinuoso camino de una trayectoria artística, donde la música ha sido su eje, pasión y compañera.

La intérprete celebró 45 años de trayectoria la noche del sábado, acompañada de sus músicos, entre los que se encontraban su hermano Enrique y su hijo, Julián André; el primero, en el bajo, el segundo, en la batería, se sumaron a la celebración convocada por la también actriz. Eres única, Cecilia, eso es todo y eres la reina, le gritaron desde las butacas en diversos momentos sus seguidores, que llenaron el recinto del Centro Histórico.

Desde el inicio del espectáculo, Toussaint tomó el escenario con la seguridad que la caracteriza, la cual ha consolidado con perseverancia, experiencia y las batallas libradas. Los ritmos se mezclaron y su potente voz removió emociones, en las que el rock también abrió paso a los recuerdos, pero los sonidos se entrelazaron entre pop, blues, funk y bolero.

Los solos de los ejecutantes de los instrumentos de viento metal, teclados, guitarras, bajo y la batería también fueron reconocidos por los asistentes que aplaudieron el talento de los músicos sobre el escenario.

Repertorio ecléctico

La cantante abrió con el tema Prendedor, que dio inicio a un ecléctico repertorio de 27 temas que abarcó más de dos horas, en las que la cantante también bailó, contó anécdotas y recordó a las personas con las que ha compartido y comparte momentos de su vida y de su profesión.

Muchas gracias, buenas noches, bienvenidos a esta celebración y gracias por acompañarme esta noche, expresó la intérprete, que siguió con Hogar, Dueña de mi esclavitud y Amantes.

Hace 30 años hicimos este disco en este teatro; levanten la mano los que estuvieron aquí; muchas gracias por regresar tres décadas después, expresó la cantante, quien agradeció a gente importante que le ayudó a hacer ese álbum.

▲ La cantante deleitó a los asistentes con 27 de sus temas.Foto Cuartoscuro.com

Recordó: Hubo músicos importantes en mi vida, gente entrañable para mí, los que ya no están aquí y no voy a llorar; pido un aplauso para los que grabaron este disco, del que hizo los arreglos su hermano Eugenio.

Se refirió a otro de sus hermanos que la acompañó en tan preciado día: ha estado a mi lado toda mi vida; ha sido mi sostén en muchos sentidos y el que marca el ritmo de mis canciones, además, ha grabado 90 por ciento de los bajos de todos mis discos; es mi hermano Enrique. También dedicó emotivas palabras a su nieto Tadeo y a su hija María.

Toussaint continuó el agasajo musical con Sólo porque sí, Aquí me quedo y Me siento bien, pero me siento mal. Con esta última rola, animó aún más al coro que hacían sus seguidores y provocó que se levantaran de sus asientos, mientras con sus celulares continuaban grabando el momento.

Esquizofrenia, Noche de día, Cuatro estrofas, No me dejes en Siberia y Tírame al corazón fueron otros de los temas que se escucharon. Hacia la recta final, antes de The gringos Are Coming, la cantante comentó: Estamos en un momento en la vida y de nuestro país que no nos podemos quedar callados ante temas fundamentales; de eso se trata el material que estoy haciendo, el cual es mi postura ante mi trabajo, a la tremenda responsabilidad y mi necesidad de hablar de asuntos que no se pueden quedar guardados.

Con Ámame en un hotel, Carretera y Para quererme bien, Toussaint cerró un concierto en el que festejó una trayectoria, disciplina y autogestión. También celebró que la organización ChildFund México la nombró Embajadora de Buena Voluntad y trabajará en favor de los derechos de la niñez.

Como se recordará, en diciembre de 2018, la pionera del rock en México fue designada por el gobierno de la Ciudad de México patrimonio cultural vivo.