Ante las deportaciones de México hacia varias naciones, la Agencia de la Organización de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) en México exhortó a las autoridades migratorias de nuestro país a asegurarse de que las personas devueltas no corran peligro al regresar a sus lugares de origen.

Este llamado surge a raíz de que en los últimos dos meses y medio, el flujo migratorio en México ha subido drásticamente. Este organismo internacional estima que diariamente ingresan de 3 mil a 6 mil personas por el sur del territorio, lo cual impacta en el número de deportaciones.

Monitoreos realizados por la Acnur han evidenciado que una alta proporción de las personas en movilidad en la región huyen de sus países por motivos de violencia, inseguridad y persecución, por lo que pueden necesitar protección internacional como refugiados, alertó.

De acuerdo con sus estimaciones, en lo que va del presente año más de 400 mil personas han atravesado la selva del Darién en Panamá. Esto equivale a un promedio de 44 mil 500 al mes entre enero y septiembre de 2023.

Por lo anterior, la Acnur señaló que la diversidad de perfiles y necesidades de quienes emigran de sus países requiere de respuestas variadas, entre las que debe considerarse el acceso a procesos de determinación de la condición de refugiado, los cuales deben ser justos, rápidos y eficientes.

En medio de la situación que atraviesan personas de la región de América y que cruzan por México con la intención de llegar a Estados Unidos, el organismo internacional insistió en que las repatriaciones de personas en situación migratoria irregular sean analizadas antes de efectuarse, a fin de ofrecer protección internacional con el propósito de que al retornar su vida no corra peligro.

Para ello, ofreció al gobierno mexicano colaborar para garantizar que las personas con necesidad de protección no sean devueltas a lugares de riesgo para ellas.