Sábado 21 de octubre de 2023, p. 18
Suchiate, Chis., Migrantes acompañados de la organización Pueblo Sin Fronteras marcharon la mañana de ayer en la frontera con Guatemala para protestar contra la cumbre migratoria convocada por México para este fin de semana.
Con mantas y una cruz de madera, caminaron cerca de la ribera del río Suchiate, por donde diariamente cientos cruzan de manera ilegal desde ese país centroamericano. 40 los muertos. 40 los millones. La Cumbre de la Corrupción. Cuba, Colombia, Nicaragua, Venezuela, Panamá, Honduras, El Salvador y Nicaragua
, se leía en una manta.
Frente a un punto del Instituto Nacional de Migración (INM) y la Guardia Nacional habilitado en un paso informal conocido como El Coyote, los quejosos lanzaron consignas. La cumbre viene a facturar la migración porque la están dejando pasar, una crisis provocada por los países intencionalmente para cobrársela a Estados Unidos
, acusó el activista Irineo Mújica, de Pueblo Sin Fronteras.
Contó que recientemente hizo un recorrido por Centroamérica, desde Panamá, y observó cómo todos los países están permitiendo el paso de los indocumentados; a veces con cobros y extorsiones, tanto de las autoridades como del crimen organizado.
El contingente también promovió la convocatoria para sumarse a una caravana para salir de Tapachula, el próximo día 30, hacia la frontera con Estados Unidos.
La decisión se debe a la lentitud en los trámites de asilo ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), que pueden tardar de seis meses a un año. Además, no hay atención del INM y muchos migrantes no tienen dinero para pagar una renta; están sin trabajo y viven en las calles, de acuerdo con el testimonio de los propios indocumentados.
Cientos de guatemaltecos cruzaron el viernes el río Suchiate hacia México para huir de la crisis política que enfrenta su país y por las extorsiones de las pandillas. Dos centenares de pobladores del municipio de Escuintla –localidad industrial en la costa de Guatemala– cruzaron simultáneamente a bordo de las balsas que operan sobre el río.
Está duro. Por las huelgas cerraron el país varios días. Nos quedamos sin empleo, la mayoría viene porque está difícil. Cerramos negocios, nos están extorsionando
, relató Mardon Pérez, quien perdió su trabajo recientemente en una empresa portuaria.
Héctor Berduo, quien era salvavidas, narró que también decidió huir por los conflictos políticos y de violencia.
En Guatemala suman tres semanas de protesta tras las elecciones presidenciales de junio y agosto pasados.