El Senado aprobó ayer una reforma que da certeza jurídica a la Secretaría de Marina en su labor de administrar el Corredor Interoceánico –tarea de la que se hizo cargo por instrucciones del jefe del Ejecutivo federal–, al ampliar sus atribuciones de vigilancia.

La minuta que modifica las leyes Orgánica de la Administración Pública Federal y de la Armada de México fue avalada por 43 votos, 32 en contra y dos abstenciones, y se remitirá al Ejecutivo para su publicación.

Al presentar el dictamen, el morenista Rafael Espino de la Peña subrayó que con esta reforma la secretaría tendrá injerencia en todo tipo de obras que antes no se establecía, relacionadas con el desarrollo de áreas estratégicas. Se proporciona a la Marina el marco legal, hoy ausente, para cumplir con sus responsabilidades de forma eficiente y transparente.

La senadora del PRI Verónica Martínez explicó que su objetivo es que la dependencia lleve a cabo vigilancia de áreas estratégicas vinculadas al desarrollo marítimo por medio de estaciones navales. Aunado a ello, se pretende aprovechar la posición geoestratégica del Istmo de Tehuantepec y competir en los mercados mundiales de movilización de mercancías a través del uso combinado de diversos medios de transporte, y con ello beneficiar a la economía nacional.