Miércoles 18 de octubre de 2023, p. a12
El nombramiento del tochito como deporte olímpico traerá un cambio de horizonte que la presente generación deberá afrontar con mayor responsabilidad. Los Ángeles 2028 serán la nueva cúspide del futbol bandera (flag football), y México, pese a ser una potencia, tendrá que reformar su mentalidad, considera Ana Rojano, seleccionada femenil y capitana desde hace cuatro años.
“Hay que quitarnos el chip de que sólo es un partido los domingos, esto ya no es un simple juego, es un deporte olímpico que empezará a profesionalizarse y hay que tratarlo como tal.”
No bastará sólo el talento, advierte Rojano, quien acumula 13 años portando la playera tricolor.
Entiende que el nivel crecerá en cuatro años y la balanza se empezará a equilibrar si no se hace al-go al respecto. El proyecto de selecciones, por tal, no puede caer en conformismo.
“Queda mucho trabajo. Hay muchas ligas en México y lo que tenemos que hacer es unirlas.
Debe haber mayor comunicación entre éstas para empe-zar a acaparar todo ese talento que a veces se pierde. Hay demasiado potencial replegado en la República. Es momento de alzar la guardia, porque ahora existe un objetivo muy grande y eso impacta a todos.
Talento emergente
Año con año existe un torneo nacional que es organizado por la Federación. Ahí es donde se recluta la materia prima. Sin embargo, no todos los equipos se presentan a estas visorías, perdiéndose, explica Ana, una gran oportunidad de descubrir las habilidades de las generaciones emergentes.
Aquí es donde deberían de estar las ligas. Esa es la única forma de ser parte de una selección. Si estas competencias no se unen y no buscan ese bien común, va a ser muy difícil que los visores puedan observar lo que hay afuera.
Rojano no tiene ningún tapujo en señalar el lugar que ocupa el Tricolor a escala mundial. Asume que nuestro país es uno de los peces gordos junto a Estados Unidos y Austria, y que esta camada y las que están por llegar tendrán que continuar con los mismos estándares.
El equipo mexicano es un rival de respeto y actualmente está en la élite del tochito producto de sus buenos resultados; el más cercano, el oro que consiguieron las mujeres en los Worlds Games en 2022. En esta misma competencia, el conjunto varonil obtuvo el bronce.
Somos las mejores y lo hemos demostrado durante mucho tiempo, y eso no tiene que cambiar al volverse olímpico, aunque sí debemos esforzarnos más para seguir en los primeros planos
, apuntó la líder de este grupo.
En ese sentido, la meta es clara; lograr una presea histórica en los Juegos Olímpicos.
Yo no veo otra cosa que no sea jugar y ganar el oro en 2028, porque eso es lo que se merece México, y es por lo que se ha venido trabajando
, asentó la atleta de 34 años, quien desconoce si el tiempo le dé para disputar la justa angelina.
El flag football será el debut de una disciplina que tiene más de 20 millones de practicantes a escala mundial, incluido México, uno de las naciones con más arraigo al futbol bandera, una versión compacta de futbol america-no, sin equipamiento y con con-tacto limitado.
Es un deporte que se juega a nivel mundial y que a lo mejor no habíamos visualizado el potencial que tenía. Hoy en Latinoamérica hay muchos países que lo están practicando. Recuerdo que anteriormente en los Mundiales sólo estábamos nosotros, Panamá, Brasil, pero ya está Chile, Colombia y seguramente se seguirán uniendo muchas naciones más. En Asia, Japón ha evolucionado mucho, así como Francia e Italia en Europa.