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Abuchea una multitud al presidente del gobierno español

Pedro Sánchez no descarta negociar con Puigdemont para encarrilar su relección

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▲ La princesa Leonor (izquierda), la reina Letizia y el rey Felipe VI saludan al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, en la recepción por el Día de la Hispanidad, en el Palacio Real, en Madrid.Foto Europa Press
Armando G. Tejeda
Corresponsal
Periódico La Jornada
Viernes 13 de octubre de 2023, p. 31

Madrid. Como ya es una tradición en los desfiles militares con motivo del Día de la Hispanidad, el presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, recibió un atronador abucheo, con gritos de traidor y de que te vote Txapote.

En pleno proceso de negociación para encarrilar su investidura en lo que sería su primera relección en el cargo, Sánchez no descartó hablar por teléfono con el ex presidente catalán Carles Puigdemont, quien reside en Bélgica desde octubre del 2017 y todavía tiene abierta una orden de búsqueda y captura por parte del Tribunal Supremo español por su participación en la declaración unilateral fallida de independencia de hace seis años.

El 12 de octubre es fiesta nacional, en la que rememoran el inicio de la colonización de América y a la Virgen del Pilar. El centro de Madrid fue escenario del tradicional desfile militar, en el que las fuerzas del ejército realizaron operaciones o maniobras especiales, además de que decenas de aviones sobrevolaron. En la plaza de Colón se colocó el palco de autoridades, que presiden cada año los reyes de España, Felipe VI y Letizia, y lo copresiden el jefe del gobierno y la ministra de Defensa, Margarita Robles.

A su llegada al palco, Sánchez recibió un sonoro abucheo y gritos de ¡traidor¡ y ¡que te vote Txapote! (en alusión a uno de los líderes de la organización armada vasca ETA), que se convirtió en uno de los lemas en su contra durante la pasada campaña electoral para criticar sus pactos parlamentarios con la coalición de la izquierda separatista vasca EH-Bildu.

A pesar de que se decidió alejar las gradas del público más de 300 metros, no se lograron esquivar los gritos de repulsa y los silbidos. Después del desfile, Sánchez habló con un grupo de periodistas, ante quienes no descartó que en el proceso de negociación con Junts per Catalunya (JxCat), la fuerza nacionalista catalana conservadora y presidida por Puigdemont, hablaría con el ex líder catalán.

Para ser investido, Sánchez necesitará del apoyo de la coalición de izquierdas Sumar, que es su actual socio de gobierno y con el que no tendría ningún contratiempo, además de JxCat, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Bloque Nacionalista Galego, EH-Bildu y Partido Nacionalista Vasco (PNV), sólo así podría sumar 178 diputados, dos más de los 176 necesarios para sacar adelante la votación, cuya fecha límite es a finales de noviembre. Sánchez, además, defendió su charla con Oriol Junqueras, líder de ERC, por la relación de cinco años que el actual Ejecutivo mantiene con los republicanos catalanes.

Tras el desfile militar, Felipe VI, Letizia y la princesa Leonor de Asturias de Borbón, se dirigieron al Palacio Real, donde la heredera participó por primera vez en el besamanos a los más de 2 mil 500 invitados. El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, desvinculó a su partido de los abucheos a Sánchez, y aseguró que su formación no merece esa difamación.