Moscú. Al inaugurar la Semana Energética, foro al que asiste como invitado especial el primer ministro de Irak, Mohamed Shia al Sudani, el titular del Kremlin, Vladimir Putin, volvió a acusar a Estados Unidos de ser el responsable del actual estallido de violencia en Medio Oriente, que –en su opinión– corre el riesgo de extenderse más allá de Israel y Palestina y tener serias consecuencias para la estabilidad global.

En ese contexto, se preguntó para qué el Pentágono (Departamento de Defensa de Estados Unidos) envió un portaviones y buques de guerra al Mediterráneo y anuncia que mandará otro. No hay motivo. ¿Van a bombardear Líbano o qué?, ¿qué pretenden hacer?; ¿o sólo creen que va a asustar a alguien?, respondió él mismo y agregó: hay gente que ya no tiene miedo de nada.

Por eso, criticó, es imposible resolver los problemas de esa manera, así sólo se agravan y no puede haber arreglo sin articular fórmulas de compromiso.

Para Putin, todo lo que está pasando ahora en Medio Oriente, pero también lo que ha sucedido a lo largo de muchos decenios, es consecuencia de una inaudita injusticia porque –recordó– cuando se fundó el Estado de Israel se acordó en ese mismo momento crear de modo paralelo un segundo Estado, el de Palestina, que hasta ahora no existe. Además –continuó– parte de las tierras que los palestinos consideran que siempre han sido suyas están ocupadas por Israel, que las consiguió en tiempos diferentes y con métodos distintos, pero mayormente por la vía de la fuerza militar.

Y lo que sucede en estos días –expuso el mandatario ruso– es resultado de que Estados Unidos en años recientes pasó por alto los mecanismos que hay para lograr un arreglo político y quiso resolver el problema por su cuenta, satisfaciendo las necesidades materiales de los habitantes de las tierras palestinas.

De hecho, trataron de sustituir la solución de problemas políticos fundamentales con una suerte de limosnas materiales, subrayó, y reconoció que para quien tiene un nivel de vida bajo es importante mejorar sus condiciones económicas y sociales; sin embargo, eso –puntualizó– es insuficiente para solucionar cuestiones políticas esenciales, siendo la principal de éstas la creación de un Estado de Palestina, independiente y soberano, con capital en Jerusalén Este, que mientras no exista no se podrá concretar un arreglo político.

El jefe del Ejecutivo ruso también atribuyó el actual estallido de violencia a la política de asentamientos israelíes en territorios ocupados y otros factores. Lo que está pasando es horrible. Se comprende que por ambos lados hay un gran resentimiento, pero deberían hacer todo lo posible por reducir al mínimo las bajas mortales entre la población civil. Si no queda otro remedio y los hombres quieren combatir entre sí, que lo hagan, pero que dejen de lado a mujeres, niños y personas mayores. Ambos lados tienen que hacerlo, enfatizó.

Putin advirtió que la extensión de la zona de este conflicto puede provocar un serio desequilibrio en el mercado del petróleo. En relación con la supuesta implicación de Teherán, y desmentida por las autoridades iraníes, en el ataque de Hamas contra Israel, el presidente ruso señaló: Ahora se acusa a Irán de todos los males y, como es habitual, sin pruebas. No hay ninguna prueba. Espero que el sentido común prevalezca, porque es real el peligro de que se interrumpa el suministro de recursos energéticos.

El premier iraquí, el otro orador de la sesión de apertura, coincidió con su anfitrión. “Medio Oriente –apuntó Al Sudani– es una región muy sensible que surte de materias primas el mercado y no se puede jugar con la estabilidad y la seguridad, ya que de lo contrario será muy difícil retornar al cauce normal y controlar la influencia que puede tener esto en el mercado energético”.

La calle musulmana está furiosa

El invitado de honor expresó también su apoyo a Palestina y recordó que durante años la Asamblea General y el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobaron más de 70 resoluciones sobre la cuestión palestina. Israel no ha aplicado ninguna, lamentó.

En su opinión, si Israel continúa bombardeando la franja de Gaza y empieza ahí una operación terrestre va a provocar la locura en la región. La calle musulmana está furiosa. Ve los crímenes que se cometen y ve que se ignora la opinión de la gente común y esto es un riesgo para el mundo entero, previno el primer ministro de Irak.