Miércoles 11 de octubre de 2023, p. 8
Sin ánimo de controvertir y bajo la premisa de respetar la postura de la embajada de Israel en el país, el presidente Andrés Manuel López Obrador justificó la neutralidad de México en el conflicto de Medio Oriente sobre la base de que se desprende de los principios constitucionales de la diplomacia mexicana. En la Carta Magna se establece que en política exterior se regirá por la solución pacífica de las controversias y la proscripción del uso de la fuerza, agregó.
Sin mediar pregunta, en su conferencia el mandatario abordó nuevamente el conflicto entre Israel y Palestina: respetamos al gobierno de Israel y muchísimo más al pueblo de Israel. Pero nosotros no queremos la guerra, no queremos la violencia. Somos pacifistas y no queremos que pierda la vida ningún ser humano, de ninguna nacionalidad, sean de Israel, sean palestinos
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Por otro lado, informó desde muy temprano de la llegada de los dos aviones nacionales a Israel para repatriar a compatriotas, puntualizando que hasta el momento hay una lista de mil personas registradas en su solicitud para regresar a México. La víspera precisó que en Israel residen alrededor de 5 mil ciudadanos mexicanos.
Destacó el papel de la cancillería no sólo para agilizar el retorno de connacionales, sino también para auxiliar a los familiares de las tres personas desaparecidas en ese país, detallando que ya fue localizado uno de ellos. La Secretaría de Relaciones Exteriores está en contacto con las familias para atender la situación de sus parientes en Israel.
Defiende política exterior
Sobre la discrepancia surgida con Israel, el Presidente reivindicó como objetivo de la diplomacia mexicana garantizar en todo momento el principal de los derechos humanos, el derecho a la vida. Recordó la tradición de la política exterior que viene desde los principios del presidente Benito Juárez; el activismo que mantuvo el general Lázaro Cárdenas con la promoción del asilo político hasta la Doctrina Estrada que se instituyó, precisó, hacia los años 30 del siglo pasado.
Reconoció que la embajada de Israel en México se inconformó con la postura que planteó el lunes pasado porque tiene todo el derecho de plantearlo (considerando que ante un ataque terrorista, nuestro país debió fijar una postura de condena más enérgica). Respetamos mucho su comunicado, su postura, pero ojalá nos comprenda, porque nuestra política exterior se alimenta de principios y está definida en la Constitución
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–Pero decía (la embajadora) que una falta de condena más enérgica era apoyar al terrorismo –se le comentó.
–No, no voy a polemizar, respeto lo que dijo ella, sencillamente quiero que se conozca cuál es el fundamento de nuestra postura. Es una política exterior en la que se prioriza la defensa de la soberanía para preservar las buenas relaciones internacionales con todos los pueblos del mundo, es fruto de nuestra historia política que se ha mantenido vigente por décadas.
López Obrador recordó que la última reforma en materia de política exterior se realizó en el sexenio de Miguel de la Madrid, en la década de los 80.