Insta a reincorporar al servicio a Luz y Fuerza del Centro

ste 10 y 11 de octubre se cumplen 14 años de la inconstitucional extinción de Luz y Fuerza del Centro (LFC): el 10 de octubre 2009 la siniestra pareja Felipe Calderón-García Luna tomaron militarmente las instalaciones y centros de trabajo de LFC.

La madrugada del día 11, Calderón emitió el inconstitucional decreto de extinción, despidiendo injustificadamente a más de 40 mil trabajadores del Sindicato Mexicano de Elecricistas (SME). Con la extinción, avalada por cierto por el PRI y por los entonces gobernadores de la zona central del país, Calderón operó un proceso de privatización en la zona central del país.

De manera demagógica, el entonces titular del Poder Ejecutivo afirmó que por ser LFC una empresa cara e improductiva, la CFE asumiría todas las actividades que realizaba dicha empresa y que con ello se mejoraría el servicio y bajarían las tarifas... Nada más falso. Desde el primer día de la extinción, en octubre de 2009, la CFE fue subcontratando empresas privadas para que atendieran el servicio público que estaba a cargo de LFC. Como se ha documentado a lo largo de los gobiernos de Calderón y Peña Nieto, casi 9 mil compañías privadas contratistas invadieron gradualmente la zona que atendía LFC, lo que muestra un descarado proceso de privatización: liquidaron a una empresa pública para contratar a 9 mil privadas.

Asimismo, la falacia calderonista de que LyFC era cara cae por su propio peso, porque resulta que, de acuerdo con datos oficiales, el presupuesto federal que se asignó en 2009 a Luz y Fuerza era de 29 mil millones de pesos, aproximadamente. Ahora, para atender la misma zona geográfica, en 2020 la CFE recibió 237 mil millones de pesos (debido a que está privatizado el servicio en esta zona). Por ello, tanto para detener esta sangría al erario como por un acto de justicia social, ¡es necesario que regrese la empresa Luz y Fuerza del Centro a la zona central del país con los trabajadores del SME!

Fernando Oliva, Mario Benítez, Tomás Cruz, Miguel Raya, Jazmín Serrano, Jorge Luis Vargas, Alfredo Arenas, Ricardo Arenas y David Miranda

Manuel Aguilar Mora aportó a la crítica histórica sobre América

Juntos nos politizamos en los cursos de invierno y verano de Ciencias Políticas, Manuel Aguilar, Carlos Sevilla y yo. Manuel y Carlos se adhirieron al trotskismo y sus publicaciones consolidaron a la Liga Obrera Marxista y al Partido Revolucionario de los Trabajadores. Vehementes y brillantes denunciaron los crímenes de Stalin y contribuyeron a la crítica histórica de América y el mundo.

El marxismo-leninismo-trotskismo adquirió entonces un estatus teórico superior a otras tendencias revolucionarias. El internacionalismo culminó con la cercanía de Manuel con Ernst Mandel tanto en México como en los congresos y coloquios a los que asistió en Europa.

Sus hermanos contribuyeron a consolidar su posición política: el excelente escritor Jorge y David, caído en la guerrilla guatemalteca. El tal Javier Mireles no tiene idea de a quien se atreve a insultar ignorando los libros sobre la izquierda en México escritos por Manuel y los dedicados a la crítica histórica.

Buen pretexto es este para celebrar los trabajos y los días de Manuel Aguilar Mora, ejemplar militante trotskista, estimada directora Carmen Lira, que bien lo conoce.

Alberto Híjar

Las mismas víctimas de las guerras

La humanidad entera está de duelo. Se hallaba apesadumbrada por las víctimas de la guerra entre Ucrania y Rusia, pero ahora se agregan las de Israel y Palestina sin que vea predominio del diálogo por encima de los misiles.

Causa desencanto que la Organización de Naciones Unidas (ONU) no pase de hacer llamados a la paz sin que se noten resultados que apacigüen, sino que parece que exacerban posiciones.

Ojalá que pronto se hallen formas efectivas de solucionar los conflictos, y que no sea la guerra y la muerte de inocentes los únicos instrumentos de los que dispone la humanidad para dirimir sus diferencias. Si la ONU no puede, ¿no sería conveniente buscar otro organismo que sí pueda?

Benjamín Cortés V.

En memoria de Ricardo Ruvalcaba Ayala

“No he muerto. Sólo me fui antes…”. Al distinguido maestro de la UNAM. Un excelente maestro nunca se olvida y sus enseñanzas duran la vida entera. En días pasados falleció el maestro Ricardo Ruvalcaba Ayala, de la generación de geógrafos 66-70 de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM.

Impartía con gran entusiasmo sus clases de cartografía del Colegio de Geografía, y motivaba a sus alumnos para estudiar e investigar los recursos naturales y sociales de México y del mundo. Los geógrafos de México sentimos la pérdida del profesor Ricardo. Lo recordaremos con gran respeto. Descanse en paz.

Conspiró Felipe Calderón, subraya

Armando G. Tejeda, corresponsal de La Jornada en Madrid, publica lo que la mayoría sabíamos: Felipe Calderón resultó conspirador; es abominable que haya propuesto que Estados Unidos y su ejército vigilen las elecciones en México, su conspiración delictiva debe ser investigada. La defensa de la 4T no debe confiarse ante tal despropósito decimonónico del gurú aludido y sus convocados.

Javier Espejel Vargas