Martes 10 de octubre de 2023, p. 31
Santiago. Decenas de encapuchados destruyeron semáforos y levantaron barricadas incendiarias al enfrentar a la policía en medio de una marcha indígena en esta capital durante la conmemoración del Encuentro de dos Mundos.
Cada año la etnia mapuche marcha en protesta por lo que consideran el despojo
de sus tierras por el Estado chileno en el siglo XIX, exigir la libertad de sus presos políticos
y en contra del estado de emergencia que permite a las autoridades desplegar a las fuerzas armadas en el control del orden público.
Cientos de indígenas se reunieron en una plazoleta desde la cual partió la caminata, pero también llegaron decenas de encapuchados que se enfrentaron a la policía, incluso antes de que empezara la marcha.
Los indígenas alcanzaron a caminar en paz unos metros por una de las vías de la Alameda, la principal avenida de la capital chilena, acompañados de música mapuche, hasta que los encapuchados provocaron a la policía con el lanzamiento de piedras y fueron reprimidos con chorros de agua.
Los desórdenes se extendieron por varias cuadras y al paso de los encapuchados quedaron barricadas encendidas, algunos semáforos rotos y fachadas de edificios vandalizadas.
Cuando la marcha llegó a su destino, en el Parque Almagro, volvieron a aparecer las barricadas y los proyectiles contra los policías, que además del agua usaron gas lacrimógeno para dispersar a manifestantes.
El Encuentro de dos Mundos, antes conocido como día de la raza
, es la fecha en que se conmemora en Chile el día en que Cristóbal Colón llegó a América, el 12 de octubre de 1492.
Entre las demandas de los mapuches están la restitución de sus tierras y el fin del estado de emergencia impuesto por el presidente Gabriel Boric hace más de un año, lo que disminuyó los ataques incendiarios dirigidos principalmente contra empresas forestales en la región de La Araucanía, 600 kilómetros al sur de la capital chilena.
En los últimos cuatro días hubo igual número de ataques.
Boric creó una comisión para determinar qué tierras podrían ser devueltas y a quiénes, pero la labor tardará al menos un par de años.