En un intento por reconectar con sus raíces, la coreógrafa colombiana Martha Hincapié Charry creó Amazonia 2040, pieza en la que reflexiona sobre presente, pasado y futuro de la selva amazónica, y explora la expresión y resistencia de conceptos como hogar, hábitat y habitantes.

El detonante del proyecto, que se presenta en el Foro del Dinosaurio del Museo Universitario del Chopo, fue la situación de la Amazonia, cuyos bosques están amenazados debido a la deforestación, los incendios y la degradación; el agua superficial se ha perdido y los ríos están cada vez más desconectados y contaminados. Situación que en el futuro dañará de manera irreversible la Amazonia y el planeta en general, explica la creadora en entrevista con La Jornada.

Nuestro futuro está intrínsecamente ligado al futuro de la Amazonia y de todas las reservas naturales, del planeta, especialmente en Latinoamérica. Debemos defenderlas y cuidarlas, vale la pena que se reflexione sobre esto, porque hemos normalizado muchas cosas como la artificialidad de los alimentos.

La obra es un solo desde un punto de vista autobiográfico, ya que sus raíces indígenas Quimbaya hacen que la narración sobre la condición de la Amazonia sea convincente.

Soy colombiana y vivo en Alemania desde hace muchos años. Tengo ascendencia de mi mamá de la cultura indígena Quimbaya, que está extinta; cuando murió mi abuela materna, hace un par de años, sentí que era la última persona de esa sabiduría ancestral, por lo que hice todo este viaje de regreso a mi tierra y mis raíces.

Como parte del proceso de investigación, Martha Hincapié contactó a diferentes comunidades de Colombia, México y Brasil. Me invitaron a trabajar los indígenas brasileños; con ellos empecé a entender más la Amazonia y su situación, todos los riesgos y las luchas que llevan.

Celebración y duelo

Sobre esa experiencia, recuerda: Fue muy emotivo ver que también somos naturaleza y ser parte de ceremonias donde se hicieron ofrendas para devolver algo a la naturaleza. También me impactó el poder, la vitalidad y, al mismo tiempo, la vulnerabilidad de la Amazonia; sin embargo, es de tal belleza, te pone la vida de manera tan cruda que no puedes negar su poder.

Amazonia 2040 es una celebración y un duelo de la región y sus comunidades. Las imágenes impactantes confrontan al espectador con la devastación del hábitat sagrado. Desde extensiones de plástico y basura en contraste con las majestuosas vistas panorámicas del Amazonas, hasta otros elementos visuales perturbadores, la pieza provoca una aguda reflexión sobre la urgente necesidad de preservar este entorno natural.

“Es un performance multidisciplinario; en el escenario es mi cuerpo en vivo y de fondo hay una videoinstalación que me acompaña los 55 minutos que dura la pieza. La proyección es todo un viaje por la Amazonia, por diferentes culturas y etnias. Es un poco inmersiva. Ya se estrenó en Berlín y ahora será en México”, agregó.

La videoinstalación proporciona información vital sobre el estado crítico de la región amazónica, y destaca la grave amenaza que enfrentan sus habitantes indígenas debido a la destrucción del medio ambiente. La perspectiva autobiográfica de la coreógrafa aporta una profundidad personal a su narrativa sobre la Amazonia. Las imágenes de la selva, los retratos de los pobladores nativos, como las mujeres Nukak o la comunidad Makuna, y la contextualización en lugares como Chiribiquete, se unen en una meditación; un performance con una diversidad de capas que se convierte en un ritual íntimo.

La pieza unipersonal interpretada por Martha Hincapié, coreógrafa, performer e investigadora, se presenta hoy a las 18 horas en el Foro Dinosaurio del Museo Universitario del Chopo (calle Dr. Enrique González Martínez 10, Santa María la Ribera).