La administración federal proyecta concluir el sexenio con 43 decretos de áreas naturales protegidas (ANP), lo que colocará al gobierno de Andrés Manuel López Obrador como el que más zonas de este tipo ha destinado para su conservación.

De diciembre de 2018 a la fecha, son 21 las ANP que se han decretado, con lo cual suman en total 203 áreas de este tipo, que equivalen a una superficie de 91 millones 608 mil hectáreas protegidas, informó ayer la secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), María Luisa Albores.

A la presentación del informe en esta materia, durante la conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, acudió parte del equipo de responsables de cuidar la selvas, bosques, humedales, manglares, y la flora y fauna del país. Se trata de una labor importantísima, es apostar por la vida, subrayó el mandatario.

Durante los próximos meses estarán listos los 22 decretos restantes para llegar a la meta pactada para el sexenio, detalló Albores.

Asimismo, presentó una gráfica en la que se indica que el gobierno de Lázaro Cárdenas concluyó con 41 decretos de este tipo; el de Ernesto Zedillo, con 30, y el de Miguel de la Madrid, con 22. Apuntó que al cierre de la actual administración se habrá protegido 4.4 millones de hectáreas más que las que ya estaban catalogadas como ANP en 2018.

La primera región decretada como ANP en el sexenio fue el caso de la sierra de San Miguelito, con 111 mil 160 hectáreas en diciembre de 2021. También se encuentra el lago de Texcoco, gracias a la lucha de los pueblos por más de 20 años, de las compañeras y compañeros del frente en defensa de la tierra, mejor conocidos como Atenco, agregó.

Junto con la zona de Peña Colorada, en Querétaro, se incorporó El Jaguar, en Tulum, Quintana Roo, y el 15 de agosto pasado se publicaron 13 nuevos decretos en seis estados, a partir de terrenos donados por Fonatur.

Con ello se salvaguardan estas regiones ante las presiones de desarrollos inmobiliarios, crecimiento urbano y proyectos de minería a cielo abierto, indicó la funcionaria federal.

De igual forma, se protegieron áreas del sureste del país, como parte de las acciones complementarias al Tren Maya. Por ejemplo, en Calakmul, se modificó el decreto de la reserva de la biósfera para aumentar su territorio. Se están cuidando con ello 3 mil especies.