En un típico caso de chapulineo, la senadora Nancy de la Sierra ya pasó en esta legislatura por dos grupos parlamentarios y ayer oficializó su adhesión a un tercero, el del PRI, partido en el que militó y del que salió en 2017, para poder sumarse en 2018 a la coalición Juntos Haremos Historia que la llevó a la senaduría.

Ya como legisladora de la alianza de izquierda, estuvo adscrita a la bancada del Partido del Trabajo, de la que se separó en 2021, para refugiarse en el llamado grupo plural.

La semana pasada trascendió que De la Sierra negociaba sumarse a la fracción del PRI, disminuida a ocho integrantes tras la salida del senador yucateco Jorge Carlos Ramírez Marín, y ayer se formalizó su adhesión a ese grupo parlamentario, con lo que éste se mantiene con nueve miembros.

En el retorno a sus orígenes, el dirigente del tricolor, Alejandro Moreno, y el coordinador de los senadores, Manuel Añorve, le dieron la bienvenida. En corrillos del Senado se habló de la posibilidad de que se convierta en la candidata de este partido al gobierno de Puebla, estado donde se le recuerda por su cercanía con el ex gobernador Mario Marín, conocido como el góber precioso.

A la par que De la Sierra concretó su regreso al Revolucionario Institucional, Jorge Carlos Ramírez Marín hizo lo propio ayer con la bancada del PVEM, con el fin de poder contender por la gubernatura de Yucatán.