Martes 3 de octubre de 2023, p. 8
Madrid. Al continuar su huelga, el Sindicato de Actores sostiene la demanda de un mayor control sobre la inteligencia artificial, capaz de recrear sus caras o sus voces. La última personalidad crítica ha sido Zelda Williams, hija de Robin Williams, fallecido en 2014.
La actriz publicó un comunicado en sus historias de Instagram en el que expuso su posición sobre esa herramienta tecnológica en el cine. “Durante AÑOS he sido testigo de cuantas personas quieren entrenar a estos modelos para crear/recrear actores que no pueden dar su consentimiento, como papá. Esto no es teórico, es muy, muy real.
“Me han dicho que la gente utiliza inteligencia artificial para que su voz diga lo que ellos quieran y, aunque personalmente lo encuentro inquietante, las ramificaciones van mucho más allá de mis propios sentimientos”, añade Williams.
Esta tecnología es alimentada con todas las imágenes, videos y grabaciones posibles de la personalidad a la que quieran replicar. Una vez que han reunido y procesado el material, esos sistemas son capaces de generar dichas recreaciones sin consentimiento previo.
Los actores vivos merecen la oportunidad de crear personajes con sus elecciones, dar voz a los dibujos animados, poner su esfuerzo y tiempo HUMANOS en realizar su actuación
, denuncia Williams.
Esa falta de protección frente a la inteligencia artificial es uno de los principales puntos por los que el sindicato se mantiene en huelga, como hicieron los guionistas antes que ellos. "Estas recreaciones son, en el mejor de los casos, un pobre facsímil de personas más grandes, pero en el peor, un horrendo monstruo, improvisado a partir de lo peor de todo lo que es esta industria, en lugar de lo que debería representar", sentencia la actriz.