Autoridades federales y estatales rescataron a 98 migrantes que viajaban hacinados en la caja de un tractocamión en la carretera 57 Matehuala-Monterrey, a la altura del municipio de Matehuala, al norte de San Luis Potosí; en dicha acción, dos traficantes de personas fueron detenidos.

El vehículo fue detectado cuando llevaba hacia la frontera norte a 31 guatemaltecos y 67 salvadoreños. Según el reporte, en el poblado Los Pocitos, policías de la Guardia Civil Estatal acudieron a brindar apoyo a personal de la Fiscalía General de la República (FGR) luego de recibir el reporte de que habían localizado a varias personas que viajaban amontonadas.

Los efectivos arribaron al lugar y reportaron que junto con el grupo de indocumentados se encontraban dos sujetos presuntamente responsables de transportarlos.

Los 98 migrantes que querían llegar a Estados Unidos de manera indocumentada fueron remitidos al Instituto Nacional de Migración para ser deportados.

Allí se les dieron alimentos y atención médica, ya que presentaban cuadros de deshidratación. Por su parte, los presuntos polleros fueron puestos a disposición de la FGR, al igual que el vehículo asegurado. En abril pasado, en la carretera 57, que conduce al norte del país, las autoridades rescataron a más de 100 migrantes que fueron secuestrados por grupos del crimen organizado.

Por otra parte, al menos 600 migrantes extranjeros arribaron a Ciudad Juárez, Chihuahua, ayer por la mañana tras viajar como polizontes en el tren; alrededor de las 9 de la mañana, el ferrocarril se detuvo a la altura de la Fiscalía General del Estado, lo que aprovecharon para bajarse y continuar su camino hacia el muro fronterizo.

El venezolano Antonio Sedial, quien viaja acompañado de su hermano, relató: Nos subimos al tren en la Ciudad de México y trataron al menos dos veces de bajarnos, pero no aceptamos; luego de tres días llegamos a Juárez y en el camino encontramos gente buena que nos dio comida, agua, café y unos rosarios para rezar. También nos tocó gente mala que nos tiró pedradas y nos gritaba que volviéramos a nuestro país. En los retenes, los militares y los de la Guardia Nacional se portaron bien, nos decían bájense, pero no nos obligaron y dejaron que siguiéramos.

Dijo que antes de salir de Venezuela analizaron las leyes y vieron cómo el presidente Andrés Manuel López Obrador recalcó que en México el tránsito para el migrante es libre.