“Nada, nada (…) Son procedimientos legales, hay libertades”, fue la única alusión que hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador a la impugnación que el ex canciller Marcelo Ebrard presentó ante la sala superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) en contra de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia (CNHJ) de Morena.

Ebrard acusa que Morena violó sus derechos político-electorales al no responder en un plazo de cinco días las quejas presentadas por militantes contra la encuesta con la que se eligió a Claudia Sheinbaum, ex jefa de Gobierno de la Ciudad de México, como coordinadora de los comités de defensa de la Cuarta Transformación.

En la mañanera de ayer se pidió al mandatario su opinión sobre el trámite de su ex canciller, y respondió de forma escueta: Nada, nada, nada. Pues son procedimientos legales y hay libertades, es lo único que puedo comentar.

Remarcó que ya concluyó su etapa como dirigente del movimiento de transformación, pues hace unas semanas entregó el bastón de mando a Sheinbaum, quien se impuso a Ebrard en la encuesta de su partido, lo que la llevará a ser la eventual candidata a la Presidencia.

Ya entregué, como es de dominio público, el bastón de mando, aunque no les haya gustado a mis adversarios, pero como no les gusta nada, también ya no es nota, planteó el jefe del Ejecutivo.

El lunes pasado, Ebrard acudió al TEPJF para pedirle que ordene a la CNHJ de Morena admitir la impugnación con la que demanda la nulidad y posterior reposición del proceso para elegir al coordinador de los comités de defensa de la Cuarta Transformación.