lguien la pendejió
en la Fiscalía General de la República (FGR) al firmar un acuerdo reparatorio con el mafioso Alonso Ancira (dueño de la ex paraestatal altos Hornos de México AHMSA, por cortesía de Carlos Salinas de Gortari), por medio del cual éste obtenía su libertad y Petróleos Mexicanos recuperaría 216.6 millones de dólares por el fraude de Agronitrogenados cometido por el empresario en connivencia con Emilio Lozoya Austin, entonces director de la empresa productiva del Estado.
¿Quién confió en él?, porque por todos es conocido que Ancira es un mafioso y debió permanecer en prisión. Sin embargo, en la FGR (léase Alejandro Gertz Manero) cayeron en el garlito: creyeron en la palabra
y honestidad
de un hampón, para que éste violara los acuerdos que lo tienen fuera de la cárcel. Y las acusaciones que enfrenta no son poca cosa: operaciones con recursos de procedencia ilícita y daño patrimonial al Estado mexicano, entre otras.
En la mañanera de ayer, el presidente López Obrador advirtió que Alonso Ancira está totalmente equivocado
si cree que al término de su mandato va a poder ser rescatado por el nuevo gobierno; no podemos dejar de atender este asunto y está abierta una denuncia penal para que se arregle este caso
.
En una primera instancia, dijo el mandatario, ya aceptó devolver los 200 (216.6) millones de dólares, pero empezó a pagar y dejó de hacerlo; creo que cubrió la mitad y falta la otra. Y aun cuando el Poder Judicial ahora defiende a delincuentes de cuello blanco y al crimen organizado, vamos a revisar todo el proceso judicial antes de irnos. Y lo otro es que quien llegue (al gobierno) no va a poder hacerse cargo de toda la deuda (de AHMSA), porque estamos hablando como de cinco, 10 mil millones de pesos
.
Entonces, con base en el acuerdo reparatorio firmado con la FGR y dado el incumpli-miento del mafioso, Alonso Ancira debe regresar al Reclusorio Norte, pues hasta donde se conoce pagó los dos primeros abonos
(50 millones de dólares en diciembre de 2021 y 54 en el mismo mes de 2022), pero del tercero (112 millones) ni sus luces, amén de que el citado gánster se fue a vivir a Estados Unidos aprovechando su doble nacionalidad (mexicana y gringa).
Así, no paga ni quiere soltar Grupo Acerero del Norte (con Altos Hornos de México, que quebró, como joya de la corona) a cuya presidencia del consejo de administración oficialmente renunció
en marzo pasado, pero en realidad sigue operando tras bambalinas, destrozando lo poco que dejó y afectando a miles de trabajadores que no cobran sus salarios desde hace siete meses, además de que el corporativo ordenó cortar el suministro eléctrico y de agua.
Antes de estos hechos gansteriles (actos criminales
, denuncian los trabajadores), el presidente López Obrador ofreció una opción
para evitar mayores daños, pero ya conocen la historia: esta empresa la privatizó Carlos Salinas de Gortari, se habla que los que privatizaron re-cibieron acciones de estas empresas, se la entre-gan al señor Ancira, la maneja muy mal, pues derrochan mucho dinero, no son buenos admi-nistradores, mucha prepotencia, mucho despilfarro, lujo barato, aviones que prestaban a políticos (como a los ex gobernadores de Coahuila Humberto y Rubén Moreira), y llevaron a la quiebra a la empresa; siempre bajo la protección del gobierno, al grado de que le compraron una planta de fertilizante (Agronitrogenados), tam-bién privatizada desde la época de Salinas, que valía 300 millones de dólares, bien pagada, y pa-garon por la planta, que en los hechos ya estaba convertida en chatarra, 500 millones de dólares
.
López Obrador propuso que Ancira firmara y dejara el consorcio a una nueva compañía acerera seria, responsable. La verdad, por las deudas que tiene, sin recibir nada, saldría ganando. Pero no, y al nuevo empresario le íbamos a ayudar para que la deuda que tiene AHMSA con el gobierno (que es considerable: impuestos, Infonavit, IMSS, CFE, Pemex), sin condonarla, sí se podía llevar a cabo una restructuración, darle plazo
y así se recontratara a los trabajadores, se pagara a proveedores pequeños y medianos de la región y se recuperara”. Entonces, en la FGR, ¿quién la pendejió
?
Las rebanadas del pastel
La empresa china Ganfeng International, asociada con la británica Bacanora Lithium, se quedó con las ganas: el gobierno mexicano le canceló nueve concesiones para la extracción de litio, incluyendo el área donde se encuentra el Proyecto de Litio de Sonora, el mayor yacimiento en suelo mexicano
( La Jornada, Braulio Carbajal).
Twitter: @cafevega