Chilpancingo, Gro., Inés Fernández Ortega, coordinadora de la Casa de los Saberes Guwá, ubicada en la cabecera municipal de Ayutla de los Libres, en la Costa Chica de Guerrero, denunció que los gobiernos federal y estatal han incumplido con el mantenimiento y operación de dicha institución, que atiende a mujeres víctimas de violencia y apoya a jóvenes indígenas estudiantes.

En conferencia virtual en la página oficial de Facebook del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Fernández Ortega, acusó que a dos años de la creación del centro comunitario, el gobierno federal ha fallado en otorgar un presupuesto propio para la operación de todas sus actividades y redujo el apoyo económico.

Mientras, el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas sólo entrega comida de lunes a viernes, pero se desatiende a los niños los fines de semana y días festivos. La también coordinadora del grupo Mires Embajadoras, señaló que la omisión de los tres niveles de gobierno se debe a la sentencia que la Corte Interamericana de Derechos Humanos al Estado mexicano dictó sobre la creación del centro comunitario, que ya abrió, aunque carece de recursos para su operación.

En marzo de 2002, Inés Fernández Ortega, indígena, sufrió tortura sexual durante una irrupción militar en su vivienda, en la comunidad Barranca me’pháá de Tecoani, municipio de Ayutla de los Libres.

Denunció que el año pasado a las seis mujeres embajadoras sólo se les otorgaron seis meses de apoyo económico y en 2023 apenas cobrarán salario por nueve meses y no por todo el año. Manifestó que la falta de recursos, limita el traslado de las mujeres embajadoras para auxiliar a otras mujeres víctimas de violencia. Hace falta una doctora para la atención a la salud.

Las mujeres embajadoras, es el termino que seda a las responsables, que vigilan y son cuidadoras de otras mujeres y de la Casa de los Saberes Guwá.